leer portada

Érase una vez una madre pato que se sentó sobre sus huevos hasta que eclosionaron en lindos patitos amarillos. Pero un huevo era diferente. Era más grande y tardó más en eclosionar. Cuando finalmente lo hizo, salió un patito de aspecto extraño. Era mucho más grande y no se parecía a sus hermanos y hermanas.

El Patito Feo

Érase una vez una madre pato que se sentó sobre sus huevos hasta que eclosionaron en lindos patitos amarillos. Pero un huevo era diferente. Era más grande y tardó más en eclosionar. Cuando finalmente lo hizo, salió un patito de aspecto extraño. Era mucho más grande y no se parecía a sus hermanos y hermanas.

Érase una vez una madre pato que se sentó sobre sus huevos hasta que eclosionaron en lindos patitos amarillos. Pero un huevo era diferente. Era más grande y tardó más en eclosionar. Cuando finalmente lo hizo, salió un patito de aspecto extraño. Era mucho más grande y no se parecía a sus hermanos y hermanas.

Los otros patos, incluso sus hermanos, no querían jugar con él porque era diferente. Lo llamaron el Patito Feo, y esto lo hizo muy triste. Así que, el Patito Feo decidió dejar su hogar y encontrar amigos que lo quisieran por lo que era.

Conoció a muchos animales en su viaje, pero todos lo rechazaron por su apariencia. El Patito Feo se sintió muy solo y deseó poder ser como los hermosos cisnes que veía en el lago.

Llegó el invierno, y hacía mucho frío. El Patito Feo encontró un pequeño estanque donde quedarse, ¡pero el agua se congeló con él dentro! Un granjero amable lo encontró y lo llevó a su casa, pero el gato y la gallina del granjero también se burlaron de él.

Cuando llegó la primavera, el Patito Feo regresó al lago. Vio a los hermosos cisnes de nuevo y se sintió triste porque nunca sería tan hermoso como ellos. Pero cuando vio su reflejo en el agua, ¡se sorprendió! Ya no era un patito feo; había crecido hasta convertirse en un hermoso cisne.

Los otros cisnes lo recibieron con las alas abiertas, y finalmente fue feliz. Se dio cuenta de que no importaba lo que otros pensaran de él; lo que importaba era cómo se veía a sí mismo. Y vivió feliz para siempre, nadando y jugando con sus nuevos amigos, los cisnes.

Cuentos Infantiles para Dormir

En Pocoyo, tenemos una gran colección de cuentos infantiles para dormir. Estos cuentos son perfectos para ayudar a los niños a relajarse y prepararse para dormir. Desde los cuentos de hadas clásicos hasta las historias cortas contemporáneas, hay cuentos para que cada pequeño lector disfrute.

CUENTOS INFANTILES CORTOS

Explora nuestra colección de cuentos infantiles cortos en Pocoyo. Estas historias rápidas y divertidas son geniales para los jóvenes lectores. Ayudan a los niños a disfrutar de la lectura y usar su imaginación.

CUENTOS INFANTILES TRADICIONALES PARA NIÑOS

En nuestra sección LEER, los niños pueden leer conocidos cuentos tradicionales. Disfruta de clásicos como La Cenicienta, Blancanieves, Los Tres Cerditos, El Ratón Pérez, El Cuento de Peter Rabbit, El Patito Feo, Ferdinando el Toro y El Traje Nuevo del Emperador. Estos cuentos son disfrutados por todos y son perfectos a la hora de dormir.

Al hacer clic en «Aceptar», acepta el almacenamiento de cookies en su dispositivo para mejorar la navegación del sitio, analizar el uso del sitio y ayudar en nuestras iniciativas de marketing. Vea nuestro Privacy Policy para obtener más información.